¿Por qué el novio no puede ver a la novia antes de la ceremonia?
¿Os habéis preguntado alguna vez el por qué de esta tradición, para algunos, o superstición para otros?
Que el novio no pueda ver a la novia antes de la ceremonia se ha heredado de la antigüedad, donde la mayoría de los casamientos eran concertados.
El hombre pagaba por la mujer a su familia o directamente las familias acordaban el casamiento sin que los hijos tuvieran voz ni voto, por lo que el novio no debía ver a la novia hasta el momento de casarse por si la transacción no se realizaba.
Parte de esta tradición es el velo, el cual servía en algunas culturas para tapar las imperfecciones y el cual no se debía levantar hasta después del “sí quiero”, cuando ya no había marcha atrás.
No eran épocas para el romanticismo que digamos. Antiguamente las bodas eran un negocio, un “apaño” entre dos familias donde el hombre adquiría una mujer que hiciera las tareas de la casa y criara a sus hijos.
Por ello el amor era secundario, era más importante su fertilidad o dotes como ama de casa.
Entonces, ¿no importaba el amor? Con el tiempo existía el cariño y el afecto de dos personas que conviven y forman una familia, al fin y al cabo pasaban la vida juntos, pero nada que ver con el concepto de matrimonio y del amor que concebimos en la actualidad.
Entonces, ¿Por qué seguimos con esa tradición?
Las bodas son un acontecimiento muy importante en la actualidad para las parejas. Son una tradición muy antigua que se ha ido modificando con el paso de las épocas.
Por suerte en la actualidad tenemos el poder de decidir si queremos seguir estas tradiciones o no, al menos en la mayoría de países y culturas.
La tradición adaptada a la actualidad
Hoy en día la tradición dicta que el novio no debe ver el vestido de novia antes del día de la boda.
Las parejas se conocen, se quieren, conviven juntas y por ese motivo deciden casarse, por el amor que sienten mutuamente y porque quieren pasar toda una vida junto a esa persona.
Pero para darle más emoción aun al día o por seguir la tradición, deciden que el novio no vea a la novia vestida de blanco hasta que ella no enfile el pasillo hasta el altar el día de su boda.
Esto implica que el novio no debe estar presente en la elección del vestido ni en las pruebas. Ambos deberán vestirse y prepararse por separado, en distintas habitaciones o casas para evitar cruzarse y sucumbir la tentación de verse antes de tiempo.
El atractivo de esta tradición
El principal atractivo de seguir manteniendo la tradición de que el novio no debe ver a la novia antes de la ceremonia, es principalmente mantener la emoción del factor sorpresa.
La novia elige su vestido, el maquillaje, el peinado, los complementos, el ramo. Mima todos los detalles para estar preciosa el día de su boda y los conserva como a su mayor secreto.
Por ello, uno de los momentos más bonitos y emotivos es la llegada de la novia a la ceremomia. Es un momento mágico en el que parece que el mundo se para y por fin se desvela su secreto mejor guardado.
Todos los preparativos, todos los nervios, trabajo, esfuerzo y tiempo invertidos en este día cobran sentido en ese mismo instante.
Es uno de los mayores atractivos de la boda para los invitados también, desvelar por fin el look de la novia y ver la cara de su chico al verla llegar. Priceless
¿Da mala suerte que el novio pueda ver a la novia antes de la ceremonia?
Pero ¿Qué mal puede hacer?
En realidad lo de la mala suerte queda a criterio de cada uno y de lo supersticioso que sea.
Si da o no mala suerte es imposible de comprobar. Si quieren saber mi opinión, yo no creo que algo así pueda pasar.
Yo he seguido la tradición simplemente porque me parecía divertido y emocionante que mi chico no supiera nada de mi look hasta el comienzo de la ceremonia.
Aunque debo decir que conozco parejas que lo han llevado a cabo por miedo a la mala suerte, y todo es respetable. Ya conocen el dicho: «No creo en las brujas, pero que las hay, las hay.» jajajaja
First Look
En los últimos años se ha puesto de moda esta opción en contraposición de la tradición de no ver a la novia hasta la boda.
Es una decisión para novios menos convencionales o que prefieren la intimidad para este gran momento.
El First Look consiste en que la pareja se vea a solas momentos antes de la boda, los dos ya vestidos y preparados para el enlace.
Ambos disfrutan de un momento íntimo y especial donde podrán demostrar sus sentimientos y cariño a su pareja sin nadie que esté pendiente de ellos.
Es una opción muy valida que cuenta con distintas variables para hacerla más o menos original y que sin duda os dejará unas fotos increíbles para nuestro álbum nupcial.
Si queréis saber más sobre el First Look la semana que viene hablaremos de ello, ¡no te lo pierdas!
Concluyendo, hemos conocido de dónde viene la tradición y por qué se ha popularizado con los años creyendo que «trae mala suerte» en el matrimonio. Cada uno es libre de escoger si quiere llevarla a cabo o no, lo que sí tenemos que reconocer que aporta gran dosis de emoción al día.
Espero que hayáis aprendido un poquito más sobre las bodas y sus tradiciones en este post, es un mundo apasionante y lleno de sorpresas y curiosidades.
Si queréis conocer un poco más sobre las traciones de boda os dejo aquí un link a otro artículo de mi blog que habla del famosolo «Algo nuevo, algo viejo, algo prestado y algo azul».
Nos vemos en próximas publicaciones, mientras podéis seguir mis consejos y trabajo en Instagram y Facebook o dejarme cualquier comentario o duda que tengáis más abajo.
Un fuerte abrazo.
Valeria.