Un momento tan íntimo como especial merece voces que de verdad os representen
Foto: Mario Casado
Uno de los momentos más emotivos de una boda civil es, sin duda, el de las palabras. Esas que se dicen con el corazón en la mano. Palabras de amor, de agradecimiento, de recuerdos, y de deseos para el futuro. Por eso, elegir bien quién va a intervenir en vuestra ceremonia es una decisión que no se debe tomar a la ligera.
Hoy te comparto algunas recomendaciones para que este momento sea tan único y auténtico como vosotros.
¿Quiénes pueden intervenir en una ceremonia civil?
Aunque no hay reglas fijas, normalmente intervienen tres tipos de figuras durante la ceremonia:
- El oficiante: la persona que guía y dirige todo el desarrollo de la ceremonia.
- Los novios: quienes, si lo desean, pueden dedicarse unas palabras entre ellos o dirigirse a sus invitados.
- Familiares o amigos: personas especiales que comparten anécdotas, palabras emotivas o divertidas que llenen de significado el momento.
El oficiante: clave para dar forma a vuestra ceremonia
1. Un amigo o amiga
¿Tenéis un amigo con don de palabra y que os conoce bien? Entonces puede ser el candidato ideal para oficiar vuestra ceremonia. Estará encantado de hacerlo, os sentiréis cómodos y, si además ha sido parte importante de vuestra historia, todo tendrá aún más sentido.
2. Un familiar
Un primo, una tía o ese hermano mayor que ha sido siempre un referente. Si creéis que puede con la responsabilidad, tener a alguien cercano oficiando la ceremonia puede ser muy emocionante y personal.
3. Una figura legal
Si queréis que la ceremonia sea válida legalmente en el mismo momento, tendréis que contactar con antelación con un notario, alcalde o concejal. En algunos municipios, incluso pueden desplazarse al lugar de la celebración.
4. Un maestro/a de ceremonias profesional
Es la opción más recomendada si preferís dejar esa responsabilidad en manos de alguien con experiencia. Un profesional sabrá darle ritmo, emoción y estructura a la ceremonia, proponiendo además ideas creativas y personalizadas.
Consejo: Si elegís a alguien cercano para oficiar, aseguraos de que se siente cómodo con el micro, con hablar en público y con el tono que queréis para la ceremonia. Y no lo obliguéis: hay personas que prefieren disfrutar de la boda desde otro lugar.
Foto: Enfok2
Lecturas durante la ceremonia: quiénes pueden hablar
Este es otro de los momentos que más emociones despiertan. Lo ideal es que hablen entre 1 y 4 personas, y que cada intervención dure entre 3 y 5 minutos. Cuanto más personales y sinceras sean las palabras, más inolvidable será este momento.
Hermanos y hermanas
Suelen emocionar con sus anécdotas de la infancia o al recordar cómo vivieron la historia de amor desde dentro.
Padres y madres
Tienen un lugar privilegiado en el corazón de los novios, y sus palabras llegan muy profundo. No suele quedar ojo seco.
Hijos e hijas
Si los tenéis, sabéis que son los protagonistas silenciosos de la historia. Solo con verles coger el micro… ya emociona.
Mejores amigos
Nadie como ellos para contar las pequeñas locuras, los inicios de la relación o los momentos más auténticos.
Otros familiares cercanos
Primos, tíos, abuelos… Si han sido figuras clave en vuestra vida, ¿por qué no darles ese espacio tan especial?
Foto: Mateo López
Un momento que recordaréis para siempre
La ceremonia civil es el corazón de la boda. Es el momento que explica por qué estáis allí, delante de vuestra gente. Pensad con calma a quién le daréis la palabra y hacedlo con intención, con cariño y con confianza.
Elegir bien a quién os va a acompañar con sus palabras hará toda la diferencia ✨
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Nos leemos en el próximo post 💛
Valeria
